Se trata de un Airbus A300 ya en desuso comprado por la ciudad de Aydin a una compañía privada de aviación por 93.000 dólares (82.500 €).
El hundimiento deliberado de este enorme avión comercial en Turquía, a poco más de 22 metros bajo la superficie del mar, tardó dos horas y media. Previamente había sido trasladado a la costa de Kusadasi con la utilización de grúas y poleas y luego arrastrado por un barco hasta el lugar seleccionado, apoyado en balsas con boyas. Cientos de curiosos observaron desde sus propios barcos o desde la costa cómo los buzos y grúas bajaban el Airbus al fondo del mar, hasta que el morro de la aeronave finalmente se deslizó hacia el fondo del mar Egeo.
La explicación es que las autoridades locales esperan que, con el tiempo, el avión hundido se convierta en un arrecife artificial que en el futuro impulse el buceo en la región. El Airbus A300 es el avión más grande utilizado para la creación de un arrecife artificial, una práctica ya utilizada por otros países.
Los funcionarios municipales de la localidad turca han recordado que el número de turistas extranjeros se redujo en casi un 30% en abril, en medio del miedo y la preocupación por la seguridad en el país, tras los continuos atentados terroristas, y las tensas relaciones con Rusia, lo que ha tenido un preocupante impacto en la economía del país, que depende en gran medida de los ingresos del turismo.
Fuente: www.hosteltur.com