Eventos gastronómicos para dinamizar destinos de interior

Los destinos de costa son los grandes beneficiados de la actividad turística de nuestro país. Sin embargo, teniendo en cuenta la tendencia creciente del turismo nacional a distribuir más las vacaciones y a realizar escapadas durante todo el año, se han ido desarrollando iniciativas en zonas de interior, incluso en los municipios más pequeños, para captar la atención del viajero. Y una de las fórmulas por las que han apostado algunos de ellos es la organización de eventos gastronómicos. Un claro ejemplo son los municipios de Alcázar de San Juan, en Ciudad Real, o Trujillo, en Cáceres, que este fin de semana organizan sendos eventos, que suponen un revulsivo para los segmentos de la restauración y hotelería, así como un factor de promoción para sus recursos turísticos.

Alcázar de San Juan es una población de 32.000 habitantes, que cuenta con un interesante patrimonio histórico y cultural, pero ha conseguido vincular su nombre a una feria de alimentación que organiza desde hace 12 años.

Desde el pasado jueves y hasta este domingo está inmerso en la Feria de los Sabores de la Tierra del Quijote, que consigue concitar la atención de unos 20.000 visitantes y un lleno total en sus alojamientos –cuenta con 600 camas en establecimientos reglados, tanto hoteles como apartamentos y casas rurales-.

Constituye un evento cultural y gastronómico en el que se relacionan dos de los valores más importantes de Castilla-La Mancha: la cultura del Quijote y los alimentos manchegos. Un encuentro enfocado tanto a profesionales como al público general que se ha convertido en uno de los mejores reclamos turísticos de la región.

Según señaló la alcaldesa de la localidad, Rosa Melchor, durante la presentación de la muestra en Madrid, en estos días la feria se convierte «en embajador de todos estos productos y en el escaparate perfecto para todos los que quieran conocer la esencia gastronómica de Castilla-La Mancha”, ya que reúne dos de los sectores más importantes para la región, el agroalimentario y el turismo -éste representa el 7,7% del PIB autonómico-.

También la localidad cacereña de Trujillo, con una población próxima a los 10.000 habitanes, organiza durante cuatro días (este año del 28 de abril al 1 de mayo) y coincidiendo con el puente de mayo, la Feria Nacional del Queso, que ya celebra este año su dición número 33. Son cuatro días que suponen el momento de mayor ocupación hotelera de la ciudad, con expositores de más de 10 comunidades autónomas, además de algún país invitado.

Según destacó el alcalde, Alberto Casero, en la última edición de Fitur, el municipio recibió más de medio millón de visitantes en 2017, un año “excepcional”, añadió. Entre los eventos más multitudinarios que organiza Trujillo cada año se encuentra la citada feria.

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