Ponte el traje de baño, las gafas de sol más très chic que tengas y un montón de crema solar. Estas son las 9 mejores playas urbanas de Europa donde podrás disfrutar de los placeres de la gran ciudad, además de pasar un día tirado al sol… ¡en el mismísimo centro!
Paris Plages, París
Paris Plages. ©Oficina de turismo de París – Fotógrafo : Amélie Dupont
Junta mil toneladas de arena, un par de palmeras, sillas plegables, torsos brillantes y vendedores de helados con el don de la ubicuidad y… tendrás Paris Plages. La “Riviera parisina” se extiende a lo largo de tres kilómetros del margen derecho del Sena, desde el Louvre hasta el Puente de Sully.
Durante el verano, zonas de la ribera del río están cerradas al tráfico y puedes unirte a los miles de parisinosy turistas que disfrutan de la experiencia surrealista de tirarse en mitad de la calle en bikini o en fardahuevos, y con un sombrero. Atento, nada de tangas, hacer topless o nudismo… ¡a no ser que quieras que te multen!
Paris Plages es un sitio muy popular, un “acontecimiento” gratuito instaurado por el Ayuntamiento de París en 2002. En un principio, se ideó como una válvula de escape para esos miles de parisinos que no podían permitirse irse de vacaciones, pero enseguida la ciudad acogió el proyecto y ahora, cada verano, millones de personas visitan la playa situada al lado del Ayuntamiento.
Københavns Havnebade, Copenhague
¡La playa en el centro de Copenhague! Aunque a muchos puede que no les llame la atención, ni siquiera lo más mínimo, la verdad es que la vida playera de la capital danesa está más de moda que nunca (al menos los pocos días de verano cuando realmente luce el sol).
El sitio más conocido para ir a bañarse es Islands Brygge, una antigua zona industrial alrededor del puerto que el Ayuntamiento se encargó de limpiar y renovar. Hoy en día es la zona más de moda de Copenhague, donde los jóvenes de la ciudad intentan impresionar al sexo opuesto con un cuerpo 10, con un traje de baño nuevo o demostrando sus habilidades para bucear.
Aunque nadar fuera de la zona de la piscina está prohibido, es supernormal saltar al agua desde cualquier lugar de la pasarela. Por la noche, los jardines del paseo se llenan de gente haciendo barbacoas, escuchando música o bebiendo algo que contenga alcohol.
Hidropark, Kiev
Con la más que polémica anexión de la península de Crimea a Rusia, Ucrania pierde algunas de sus mejores playas. Sin embargo, todavía podemos disfrutar de la vida playera en Ucrania, incluso en Kiev , que está situada a cientos de kilómetros del mar.
En los calurosos días de verano, las masas se dirigen a Hidropark, situado solo a unos minutos en metro del centro de la ciudad. En la ribera del río Dniéper puedes encontrar playas llenas de lugareños jugando al voleibol, nadando o cocinando jugosos kebabs a la brasa. Además también hay un casino, una playa nudista, una discoteca en la misma arena y el mayor gimnasio al aire libre del mundo. ¿Qué más se puede pedir?
South Bank Beach, Londres
En Londres , también hay playa… Pero hay que echarle imaginación. Si lo que buscas es arena de verdad, será mejor que te dirijas a la ribera sur del Támesis: es un río que sufre la marea, lo que significa que el agua sube y baja dependiendo de la hora del día, dejando al descubierto amplias franjas de arena, eso sí, no te esperes la arena más blanca del mundo.
Aun así, los fanáticos de la playa no desisten, y, más a menudo de lo que nos gustaría, puedes encontrarte con gente paseando por la zona y recogiendo piedras. Aunque, teniendo en cuenta la cantidad de restos que flotan en el río, no te recomendamos que lleves chanclas. Puede que algunos restos resulten interesantes, y otros simplemente… ehhh… no.
Blijburg aan Zee, Ámsterdam
Blijburg aan Zee es la playa nómada de Ámsterdam. Es la verdadera playa “amsterdamiana” con ese toque natural e inconfundiblemente isleño infundido por el rollo relajado, bohemio y un poco al estilo de la peli Dirty Dancing: Havana Nights. Todo ese rollo de “hecho a mano” hace que cuando estás Blijburg te invada esa sensación playera.
Desde su apertura en 2003, Blijburg ha sido la playa urbana más conocida de Ámsterdam, y ya ha pasado por 3 ubicaciones diferentes en la zona este de las islas de Ijburg. Blijburg tiene tanto éxito, que los playeros la siguen allá donde la instalan. Simplemente están contentos, “blij” con Blijburg. ¿Y quién no lo estaría con todo lo que se puede hacer?
Hogueras, festivales, música en directo, fiestas temáticas, copeo de verano, comida vegetariana y orgánica de todo el mundo. Y *redoble de tambores*… ¡no está prohibido nadar!
Yaam, Berlín
Ruda, lluviosa y lejos del mar, Berlín no es la ciudad que te viene a la cabeza cuando piensas en un bar playero. Sin embargo, tiene algunos esparcidos a lo largo del río Spree, donde han colocado palmeras artificiales y arena sacada de las obras de la ciudad, o la que han traído en camiones desde la costa báltica, que convierten a la capital alemana en un paraíso tropical (o casi) los días calurosos de verano.
Uno de los bares playeros más populares y desde luego más relajados es Yaam, de Friedrichshain. Este bar es uno de los mejores embajadores del reggae y de otros estilos de música caribeña y además tiene una buena oferta de comida y bebida del Caribe.
Pero Yaam no solo se preocupa de que te relajes, también organiza conciertos, te ofrece la posibilidad de practicar deportes y dispone de una zona especial para niños.
Žluté lázně, Praga
Solo porque te encuentres en mitad de la capital de un país centroeuropeo sin salida al mar, no significa que no puedas disfrutar de los placeres de la vida playera. Al menos no en Praga.
La playa más grande de Praga, junto al río Moldava, es una zona recreativa con mesas de ping-pong, campos de fútbol, canchas de voleibol, de petanca, instalaciones para escalar o simplemente zonas donde echarte una siesta en una hamaca. También hay una piscina para niños que es el contrapunto ideal del restaurante (con cervecería al aire libre), acceso a WiFi, sesiones de DJ y, sí, incluso hay una zona para nudistas. Situada en la ribera oriental del Moldavia, (justo debajo de unos boscosos acantilados) y a solo unas paradas de tranvía del castillo de Vyšehrad, Žluté lázně resulta un lugar refrescante donde escapar del calor del verano.
Playa de Bruselas, Bruselas
¿Adónde van para refrescarse después de un caluroso día en la oficina los miembros del Europarlamento, los diplomáticos y los becarios de la UE? Pues a la playa de Bruselas.
Durante la época veraniega, la calle empedrada que discurre al lado del Canal de Bruselas se convierte en una playa con la ayuda de la arena importada, las palmeras y las sillas plegables. Es el lugar ideal para jugar al voleibol y después tomarse un cóctel de frutas bien frío bajo la sombrilla.
Playa Långholmen, Estocolmo
Los veranos en Suecia no son calurosos ni húmedos, sino relativamente frescos y agradables. Justo como el ambiente de la capital, Estocolmo, donde la gente aprovecha los largos días nórdicos para darse un chapuzón en las limpias aguas del sorprendente archipiélago de la ciudad.
Una de las playas urbanas más conocidas y queridas de Estocolmo es Långholmen, situada en la isla que lleva el mismo nombre. La playa se encuentra justo al norte de la antigua prisión. Los fines de semana que hace calor se llena bastante de gente, con familias que aprovechan para hacer pícnics en el césped y adolescentes ruidosos que se adueñan de la plataforma de baño.
Es el lugar ideal para relajarse y disfrutar al sol… y puedes refrescarte fácilmente comprándote un helado en uno de los muchos carritos ambulantes.